Investigadores y estudiosos del campo de la
educación, las ciencias sociales y las ciencias exactas, así como numerosos
trabajos producto de congresos y encuentros, muchos de ellos promovidos por
UNESCO, coinciden en señalar la importancia que tiene el arte y el desarrollo de
la creatividad en el ámbito educativo, sea cual sea su nivel, en vista a los
desafíos con los cuales los niños, jóvenes adolescentes y profesionales, se
enfrentarán en su vida.
Antes de avanzar en el desarrollo del presente tema, citaré una cuestión interesante pero a la vez reflexiva que plantea Douglas Crimp, parafraseada por Ernst van Alphen1 acerca de la enseñanza de la historia del arte: ¿Qué historia, la historia de quién, historia con qué propósito? Es decir, interroga sobre qué tipo de historia del arte se debe enseñar no sólo en las instituciones educativas sino a la comunidad en general interesados en conocer sobre el proceso histórico del arte. A mi parecer, sugiere, y dirigiéndose a los especialistas o involucrados en el estudio del arte a tener una “ubicación” de índole filosófica, espacial y temática ordenada para establecer una cronología sobre los procesos registrados en el arte, en base a la observación, el análisis y el estudio de esta manifestación cultural de la civilización humana a lo largo de la existencia de la humanidad.
https://www.google.com/search?num=10&hl=es&site=imghp&tbm=isch&source=hp&biw=1366&bih=527&q=arte+abstracto&oq=ARTE&gs_l=img.1.1.0l4j0i3j0l5.1387.1890.0.13793.4.4.0.0.0.0.232.718.0j2j2.4.0...0.0...1ac.jCpan1KgCT8
• Aprender para saber
• Aprender para hacer
• Aprender para vivir juntos
• Aprender a ser.
Paralelamente, las investigaciones en ciencias
sociales han reconocido en la dimensión creativa de los seres humanos, uno de
los aspectos fundamentales, por lo que, a los conceptos predominantes al
presente –acción y conocimiento, pensamiento racional y normativo–, es necesario
agregar un tercer concepto que está relacionado con el carácter
creativo de la inteligencia.
Acerca de la importancia que el arte tiene en la
educación y formación de la persona podemos rescatar antecedentes de todo tipo.
Por ejemplo, en octubre de 2001 se celebró una reunión de expertos bajo el
título de "La educación artística en América Latina y el Caribe", en Uberaba
(Minas Gerais, Brasil.), auspiciada por UNESCO en la que se analizaron las
políticas educativas para la formación continua y el perfeccionamiento
profesional, resaltando la necesidad de incentivar a los profesores a tener
contacto directo con las manifestaciones artísticas y a ampliar las capacidades
para gozar, comprender, vivir en el arte y reflexionar sobre las propias
prácticas educativas.
Del mismo modo, expertos abordaron propuestas
metodológicas para la óptima integración del arte en los programas escolares y
los diversos modos de contextualización del arte. Todos los expertos
coincidieron en la importancia que la formación artística tiene en el desarrollo
integral de la persona.
Recogiendo lo vertido hace más de una década en Brasil, planteamos algunas reflexiones en torno a la enseñanza de contenidos teóricos para alumnos provenientes de diversas carreras (ingeniería, arquitectura, escenográfica, industrial, ciencias de la comunicación, historia, etc.) que en su mayoría se encuentran en la etapa inicial de formación. Creo necesario estimar la teoría artística y su problemática en las tendencias estéticas y en nociones básicas características de la historia del arte dentro de un amplio recorte temporal (desde la Prehistoria hasta la actualidad), al tiempo que tiene entre otros objetivos complementar los aspectos morfológicos, conceptuales y perceptivos adquiridos por los alumnos en otras materias, teóricas y prácticas.
La historia del arte -cualquiera sea la idea que de
ella tengamos- es un área de estudios que no aparece como prioritaria si se toma
como parámetro la currícula de estudios de las distintas modalidades de la
Educación. En los espacios dedicados a la historia, las artes suelen quedar
relegadas al anecdotario marginal, si es que se las tiene en cuenta. Su campo
disciplinar y su realidad académica proporciona el conocimiento de la historia
del arte como disciplina científica, sus temas y problemas propios, relaciones
con otros campos, sus desarrollos universitarios y la investigación actual en el
área. Hablamos, también, de la producción y lectura de imágenes, su historia y
sus vínculos con las diversas culturas y sociedades.
En
base a estos lineamientos, consideramos, de un lado, el trabajo con conceptos y
problemas y, de otro, el pensamiento estratégico y transaccional, procedente de
las teorizaciones sobre el proceso de lectura y escritura y dirigido a formar
lectores autónomos (cfr. Marín)2.
Ambas orientaciones nos son pertinentes para recuperar el sentido de la
enseñanza de nociones teóricas. Creemos que las dimensiones de análisis a las
que nos referimos potencian los vínculos entre los niveles de conocimiento
propios de la enseñanza disciplinar universitaria: estructural conceptual, de
resolución de problemas, epistémico y de investigación, sin que por ello se
establezcan como la única acometida
metodológica.La misma preocupación por elaborar lineamientos generales para una programa de educación común, organismos e instituciones de la Comunidad Europea(3) –que vienen trabajando desde el 2001, formularon en Bruselas, 2005, recomendaciones en un documento titulado "Competencias claves para el aprendizaje a lo largo de toda la vida, un marco referencial europeo".
https://www.google.com/search?num=10&hl=es&site=imghp&tbm=isch&source=hp&biw=1366&bih=527&q=arte+rupestre&oq=ARTE&gs_l=img.1.9.0l4j0i3j0l5.1845.2325.0.10180.4.4.0.0.0.0.582.1031.1j1j1j5-1.4.0...0.0...1ac.7AEias1CJU8
Entre las competencias claves propuestas se destaca la expresión cultural, la que implica la inclusión del arte en los programas de estudio. La Comunidad dice al respecto:
[…Las habilidades se relacionan tanto con la valoración como con la expresión: la propia expresión a través de una variedad de medios y el desarrollo de las capacidades innatas para apreciar y disfrutar de las obras de arte y sus manifestaciones. Las habilidades incluyen también la capacidad de relacionar sus propios puntos de vista creativos y expresivos con los de los demás, a la vez que implican identificar y aprovechar las oportunidades económicas devinientes de la actividad cultural…..".].
El
arte en la educación, ha sido considerado por los expertos en el mundo como el
elemento fundamental para contrarrestar el bombardeo mediático de la cultura
globalizada, en tanto se constituye en un medio para la apreciación de los
propios valores culturales y para el respeto y valoración de la diversidad
cultural y en un puente para el abordaje creativo de otras disciplinas del
conocimiento y para acceder a las nuevas
tecnologías.
Por
consiguiente, el desarrollo de la creatividad y la práctica de las artes en el
ámbito educativo favorece la actividad crítica y comunicacional, en tanto que la
práctica de sus disciplinas (música, arquitectura, plástica, escultura, teatro o
danza) promueven el trabajo en equipo y la consecuente toma de conciencia para
la asimilación de valores como la solidaridad, el respeto por la diversidad, la
tolerancia, la cooperación y la valoración de la propia
identidad.
https://www.google.com/search?num=10&hl=es&site=imghp&tbm=isch&source=hp&biw=1366&bih=527&q=arte+moderno&oq=ARTE&gs_l=img.1.3.0l4j0i3j0l5.1485.2032.0.8933.4.4.0.0.0.0.234.592.1j1j2.4.0...0.0...1ac.KHFwj0vGikA
En historia del arte debemos primeramente
desprendernos de un enseñar de tipo taxonómico y enciclopédico: largos listados
de estilos y sus características, artistas y obras. Un estilo es mucho más que
un conjunto de rasgos formales identificables en obras pictóricas, escultóricas
o edificios que se desarrolla en determinado período histórico. No se trata
tampoco de descartar esa información, sino de desnaturalizarla y resituarla
dentro de procesos, estructuras conceptuales y problemas propios de la
disciplina. Y subrayamos esto último, pues no debemos convertir nuestra
asignatura en otra (en “historia”, precisamente) al acentuar los contextos
sociohistóricos, y al mismo tiempo, evitar reduccionismos, simplificaciones y
tratamientos superficiales de su corpus
temático.
Resulta,
además, importante destacar que el propósito de la educación artística es
desarrollar, a partir del aprendizaje de sus lenguajes propios (música,
arquitectura, escultura, plástica, danza, teatro, arte electrónico, etc.), un
amplio espectro de capacidades y competencias. Tal como señala Edgar
Morin(4):
De lo antedicho, afirmamos que el arte no es sólo
una construcción fundamental en lo estético, es una construcción cultural
multidimensional. La enseñanza de los Lenguajes Artísticos, introduce una visión
pluralista y amplía los valores, respetando los diferentes modelos culturales
sin perder los propios. La restricción del arte en el ámbito educativo dejaría
planteado un nuevo problema de marginación en una importante área o dimensión de
la vida cultural nacional, ya que para muchos, es la educación pública la única
vía de acceso posible.
https://www.google.com/search?num=10&hl=es&site=imghp&tbm=isch&source=hp&biw=1366&bih=527&q=arte+digital&oq=ARTE&gs_l=img.1.4.0l4j0i3j0l5.1908.2445.0.7379.4.4.0.0.0.0.550.873.2j1j5-1.4.0...0.0...1ac.6lX9tA5Vh8w
Aclaramos esto debido a que en general se tiende a
percibir a los contenidos de las ciencias sociales y humanas como reducidos en
complejidad conceptual y metodológica, “fáciles” de aprender; creencias que
conducen a, paradójicamente, la generación de ideas erróneas en el cohorte y a
la obstrucción de su comprensión genuina. Es de relevancia poner el acento en el
hecho de que los saberes son construcciones científicas, instrumentos
conceptuales y no realidades en sí mismas o pruebas de
verdad.
Si observamos o revisamos nuestro contexto, muchos profesionales no se hallan preparados para las demandas que les depara la práctica, “hay zonas indeterminadas de la práctica -tal es el caso de la incertidumbre, la singularidad y el conflicto de valores- que escapan a los cánones de la racionalidad técnica” (Schon, 1992:20) (5).
Efectivamente, cuando el caso “no figura en el
libro” se vuelve necesario recurrir a la improvisación, a la creatividad para
probar tácticas propias a fin de resolver situaciones concretas.
Sin embargo, no todos los profesionales salvan con éxito estas
situaciones.
Al hablar
de creatividad, identificamos no solamente la resolución de problemas sino la
capacidad de ir más allá de la información dada, que remite a la actividad
inventiva de producir sistemas genéricos y al desarrollo de facultades para
discernir cuándo resulta apropiado aplicarlos.
La
creatividad es capaz de “convertir la educación general en una educación para la
generalización, adiestrando a los individuos a ser más imaginativos, estimulando
su capacidad para ir más allá de la información dada hacia reconstrucciones
probables de otros acontecimientos” (Bruner, 1988:43-44)(6).
Aprender
a ver también es una forma de pensamiento, una destreza
generalizable;
de acuerdo con Eisner las imágenes se configuran a partir de nuestra transacción
con las cualidades empíricas que surgen en el cine, la fotografía, la pintura,
las melodías, las palabras; el arte informático; así nuestra imagen personal de
la belleza, de lo femenino o de lo masculino “están influidas por las imágenes
públicas que nos encontramos” (Eisner, 1998:232) (7).2.- Marín, M. (2005): Teoría de la escritura como proceso, Posgrado en Constructivismo y Educación, Bs As, FLACSO-Argentina y UAM.
3.- (2005/0221(COD). Proposal for a RECOMMENDATION OF THE EUROPEAN PARLIAMENT AND OF THE COUNCIL on key competences for lifelong learning THE EUROPEAN PARLIAMENT AND THE COUNCIL OF THE EUROPEAN UNION)
4.- Morin, Edgar. Los siete saberes necesarios para la educación del Futuro. Ediciones Nueva Visión, Buenos Aires, 2002, pág. 20.
5.- Schon, D. (1991). La formación de profesionales reflexivos. Barcelona: Paidós.
6.- Bruner, J. (1988). Más allá de la información dada, Desarrollo cognitivo y educación. Madrid: Morata.
7.- Eisner, E. (1998). El ojo ilustrado. Indagación cualitativa y mejora de la práctica educativa. Barcelona. Paidós
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